BLOG LITERIO DE MARIO PÉREZ ANTOLÍN







domingo, 19 de abril de 2009


HUBBLE

Un cementerio de gases
forma la materia oscura.
Una coreografía de insectos
digiere el resto de gravedad
en un ciclón de escoria brillante,
y sacude con su estela
los contornos planos de la nada.
En este océano de licor
bucean los asteroides,
cual ballenas dirigidas
por la radiación de fondo,
hasta quedar varadas en una
playa sin principio ni final.
Todo empezó quince mil
millones de años atrás,
y hoy observamos este
abrasador campo pirotécnico
desde un planeta insignificante,
cercano a una pequeña estrella
de una galaxia que gira
en los confines de un universo,
que además quizá no sea el único.